Hoy día en los negocios, lo que no crece decrece. Por lo que el crecer es parte de la agenda diaria.
Uno de los elementos fundamentales del crecimiento en las empresas es el control interno. Este control interno es un conjunto de mecanismos que nos permiten saber cómo se están haciendo las cosas en la empresa.
Con base en este controlamos todas las operaciones de nuestra empresa; se vigila el buen uso de los recursos; y se previene el desvío y el fraude.
De la calidad del control interno depende la calidad de la información base para la vigilancia y la planificación de las acciones futuras de la empresa.
El control interno se integra de:
- Organigrama
- Manuales de funciones y actividades
- Formatos y procedimientos de autorizaciones
- Sistema de contabilidad
- Auditoría interna y externa
La importancia del Control interno radica en la seguridad que nos brinda de que las cosas se están haciendo como se planearon y que la utilización de los recursos es la correcta y adecuada para los fines que se persiguen.
Pero además constituyen la piedra angular para la planeación del futuro y del crecimiento. Sin control interno adecuado, crecer en ventas, tamaño, etc., no tiene sentido.
Sin control interno adecuado, lo que crecerían serían los problemas, no las ganancias.